¿Soy sólo yo en mi TCA?

Fotografía con Licencias Creative Commons

Por: Gabriela González Ruiz, Jocelyn Paz Trejo

Los Trastornos de la Conducta Alimentaria, llamados TCA; son afecciones que pueden impactar negativamente la salud, las emociones y la capacidad de desempeñarse en áreas importantes de la vida. Se desconoce el origen exacto de estos trastornos. Al igual que con otras enfermedades mentales, puede haber muchas causas, por ejemplo, las siguientes:

• Factores Familiares

Ambiente familiar desestructurado: Si dentro del núcleo familiar no existe un ambiente estable y seguro, es más común que haya una tendencia a desarrollar un TCA, sobre todo en quienes son más vulnerables. 

Ambiente familiar sobreprotector: Vivir dentro de una familia en donde la comunicación o la dinámica familiar es excesivamente controladora y exigente llega a influir en el desarrollo de un TCA. 

Experiencias vitales estresantes: Vivir un cambio traumático dentro de la familia, por ejemplo, la muerte de un ser querido, es otro factor que incide en la probabilidad de padecer un TCA.

• Factores Sociales

Presión social respecto la imagen: Cánones de belleza dominantes que generan problemas en la salud, ésta la misma presión social que insiste en que se cumplan. Uno de los canales por los que se replica este problema, son los medios de comunicación, quienes difunden y normalizan dicho modelo de belleza. 

Ciertos deportes o profesiones: Practicar la danza, por poner un ejemplo, favorece la aparición de los TCA ya que exige contar con cierta complexión para realizar muchos movimientos; sumado a ello están los deportes que dividen a las categorías por peso, como el box. Sin embargo, en algunas profesiones como modelos y actores tienden a cumplir, con cierta imagen corporal para alguno de sus papeles. 

Críticas y burla relacionadas con el físico: Muchas personas desconocen que las burlas hacia niños y adolescentes, tienden a generar inseguridad, cuyo destino puede ser la aparición de un TCA. 

El actual sistema de tallaje: Encontrar una talla de ropa apropiada, suele ser complicado por la cantidad de marcas que existen; lo que puede causar confusión al no encajar con las medidas.

Presta atención a los hábitos de alimentación y a las creencias que pueden indicar conductas poco saludables, así como a la presión de grupo y la publicidad que puede desencadenar los trastornos de la alimentación.

Lamentablemente, muchas personas que sufren trastornos de la alimentación pueden creer que no necesitan tratamiento. Si estás preocupado por un ser querido, pídele que hable con un especialista. Aunque no esté listo para reconocer que tiene un problema con la comida, puedes iniciar el camino expresando tu preocupación y deseo de escuchar.

Bibliografía:

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• PATRICIO FUENTES G. SERVICIO DE NEUROLOGÍA, HOSPITAL DEL SALVADOR (2014). Revista Chilena de Neuro-Psiquiatría. Órgano Oficial de la Sociedad Chilena de Neurología, Psiquiatría y Neurocirugía. Chile. Vol. 52, suplemento n° 1. Fecha de consulta: 30 de septiembre del 2021. Disponible en: https://www.sonepsyn.cl/revneuro/enero_marzo_2014/Suplemento_2014_1_Neuro_Psiq.pdf
• SYLVIA SCOTT-STUMP. (2016). Nutrición, Diagnóstico y Tratamiento 8º Editorial: Lippincott Williams & Wilkins: (pág. 275-280) Fecha de consulta: 25 de septiembre del 2021. Disponible en: https://www.wolterskluwer.com/en/solutions/ovid/nutricin-diagnstico-y-tratamiento-13303?