Historia de las Pandemias, Epidemia de Sarampión en Fiyi 1875

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El curioso

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La epidemia de sarampión que hubo en Fiyi representa un momento importante en la historia de las epidemias. Mas allá del gran número de muertes de los nativos, que jamás se habían encontrado con esta enfermedad, la epidemia ha servido como ejemplo de pérdidas tanto humanas como culturales que se pueden ver involucradas en esta situación.

En el otoño de 1874 el gobierno nativo de Fiyi cedió la isla al Imperio Británico como una colonia de la corona. Así el gobierno británico inició la tarea, que tomaría 9 meses, de enviar un nuevo gobierno a Fiyi por vía de Australia. Al mismo tiempo, la reina Victoria, mandó al Rey Canibal Chakobau, a su familia y a otros 100 habitantes de Fiyi a Sydney para un viaje cultural.

El trayecto desde Fiyi a Sidney, en ese entonces, tomaba 19 días. El día 13 del viaje de regreso el hijo de 25 años del Rey Chakobau, desarrolló un exantema y fiebre. El médico del barco lo diagnosticó con sarampión, dejándolo aislado en un cuarto aparte.  Aunque lo aislaron, el barco no colocó la bandera amarilla que solía levantarse cuando había alguien enfermo en cuarentena a bordo, y sobre todo, nadie pensó en la probabilidad de que los 100 habitantes de Fiyi que también realizaron el viaje, podrían estar incubando la enfermedad.

A regresar a Fiyi, el el Rey Chakobau fue solicitado en una reunión a la que acudirían todos los jefes de las otras tribus caníbales de Fiyi, buscando persuadirlos de unirse al nuevo gobierno. Esta sería la reunión más grande en la historia de Fiyi. El 25 de enero de 1875, aproximadamente 13 días después del regreso de Australia, se reunieron 69 jefes junto con otros 800 habitantes y 143 policías de la corona, algunos de los cuales ya estaban iniciando con síntomas. Al terminar la reunión todos regresaron a sus casas, iniciando una epidemia de sarampión que se expandió rápidamente por todo el territorio, incluidas las islas de alrededor. 

Los Fiyianos se metían al mar y se envolvían en pasto fresco para bajar la fiebre. Mientras tanto, los sanos quemaban las casas de los enfermos para evitar contagios, a veces con la persona aún dentro. Los cadáveres se encontraban tirados por todas partes. Un estimado de 40,000 personas, un tercio de la población de Fiyi, falleció en cuestión de semanas. 

Desde esta epidemia surgió el término “epidemia de suelo virgen”, que ahora se utiliza para denominar a la re-emergencia de una enfermedad recientemente introducida a una población totalmente susceptible. Antes de adquirir este significado, en la era eugenética (1879 a 1933), se pensaba diferente. Se comenzaba a asimilar la teoría Darwiniana de la evolución. Se creía que situaciones como la musicalidad, susceptibilidad a tuberculosis, criminalidad, y pobreza eran hereditarias. Esto llevó en el mundo a generar nuevas políticas que promovían la “mejora” de la “raza” humana. Se pensó en el momento que la mayor mortalidad experimentada en Fiyi, había sido causada por problemas en la raza. Esto llevó a que se importaran personas de otros lugares, en especial del Caribe, forzándolos a mezclarse generando descendencias interraciales. 

El sarampión es una enfermedad que antes de 1960, afectaba al 90% de la población menor de 20 años. Creando un cuadro de exantema, fiebre elevada, tos, conjuntivitis y rinitis. La enfermedad se transmite a través de gotitas respiratorias, de la tos y el estornudo de los pacientes. El virus afecta el tracto respiratorio y se extiende a todo el organismo. La mayoría de los infectados se recuperan, generando inmunidad para toda la vida, a pesar de esto, pueden ocurrir algunas complicaciones, como la neumonía que se asocia a 60% de la mortalidad y la encefalitis que puede ocurrir en diversas variantes; una de estas es la pancencefalitis esclerosantes subaguda que se presenta varios años después de la infección inicial.

La vacuna se creó en 1963. A pesar de que aproximadamente el 80% de los niños del mundo la reciben, la enfermedad causó 110,000 defunciones mundiales, en niños menores de 5 años en el 2017 (OMS 2017). Gracias a la vacuna las muertes por sarampión se han reducido en un 80%, estimando que en los últimos 17 años se han evitado más de 21 millones.

Bibliografía.

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